El "quieto " es un ejercicio más difícil que otras señales, ya que va en contra del comportamiento natural del perro de seguirle. Los perros están condicionados a seguir los movimientos de sus humanos, por lo que el "quieto" requiere un alto grado de control de los impulsos y autocontrol. Su perro debe aprender a no fijarse inmediatamente en sus movimientos, sino a permanecer en la posición que usted le ha dado.
¿Por qué es tan importante la "estancia"?
Un "quieto" bien entrenado permite a su perro reaccionar con calma, incluso cuando se encuentra en una situación excitante. Ya sea una visita del servicio de paquetería, un viaje al veterinario o una espera en la calle, el "quieto" proporciona a su perro una estructura clara y le ayuda a controlar mejor sus reacciones.
Al adiestrar a su perro para que "se quede", mejorará su tolerancia a la frustración. Porque a medida que usted se aleja de él, tiene que aprender a aceptar este reto sin ponerse nervioso ni salir corriendo detrás de usted. Este autocontrol tiene un efecto positivo en muchas otras áreas del comportamiento de su perro y garantiza una mayor tranquilidad en la vida cotidiana.
Situaciones cotidianas en las que el "Stay" es útil:
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Visitantes en la puerta: en lugar de que su perro corra frenéticamente hacia el visitante, puede darle una posición clara desde la que pueda observar la situación diciéndole "quieto".
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Entrega para llevar: Su perro permanece tranquilamente en posición mientras usted acepta la entrega.
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Visitas al veterinario: Si su perro tiene que permanecer quieto durante el examen, un "estate quieto" fiable es de gran ayuda.
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Esperar en los cruces de carretera: Su perro puede permanecer seguro en una posición mientras usted comprueba los alrededores.
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Adiestramiento para exposiciones: El "quieto" también es esencial en el ámbito deportivo para dar a su perro instrucciones claras.
